sábado, 3 de octubre de 2009

HABLEMOS DE SIMBIOSIS...

Agosto 10 de 2009

… como uno de los elementos de nuestra estructura mental más perjudiciales para la salud de nuestro espíritu; y como el elemento que bloquea totalmente nuestro crecimiento y aprendizaje. (En otro artículo hablaremos de la simbiosis como elemento benéfico esencial en el desarrollo de especies animales y vegetales).

Simbiosis, Definición: Asociación de individuos animales o vegetales de diferentes especies en la que ambos asociados sacan provecho de la vida en común (Diccionario de la lengua española.)

Para diferenciar la simbiosis buena que se da en la naturaleza de la simbiosis perjudicial que se presenta entre los humanos, llamaremos a esta ultima “simbiosis no resuelta”, como la bautizó el maestro Herinulfo Londoño.

Desde el momento mismo de la fecundación el hombre es un ser parasito:
Parasito, Definición: [Organismo] vegetal o animal que vive a costa de otro [organismo] de distinta especie alimentándose de las sustancias que este elabora y perjudicándole aunque sin llegar a producirle la muerte.

Alejándonos de la definición, en este caso hacemos referencia a un ser que se alimenta de otro ser de su misma especie sin perjudicarle (aparentemente).

Luego, después del nacimiento, y más exactamente después del corte del cordón umbilical, se establece con la madre una relación simbiótica. En este momento y solo aquí es un ESTADO DE NECESIDAD MUTUA REAL. Y es real porque sin el amor, la nutrición y los cuidados que aporta la madre el hijo moriría. Y como contraprestación el bebe aporta a la madre caricias, satisfacciones emocionales y le estructura todo su tiempo (Una madre en los tiempos inmediatos al pos nacimiento estructura todo su tiempo única y exclusivamente en razón de la atención de su bebe).

Bajo circunstancias normales y sanas, después de que el niño adquiere conciencia propia la relación con la madre se comparte en AUTONOMÍA. A partir de ahora es un ESTADO DE LIBERTAD; nótese el cambio de la palabra necesidad por la palabra Libertad. La principal característica es que ambos seres se dan su mutuo aporte SIN NECESITARSE.

Sin embargo, y es mucho más común de lo que la gente cree o de lo que somos conscientes, lo que se genera en estos momentos es una simbiosis no resuelta en la que ambos seres quedan atados, en una permanente y mutua necesidad.

A continuación describiremos someramente los principales condicionantes de este tipo de patología mental:

1. Desde la posición del niño: USTED (madre, padre, hermana(o), abuela (o), tia (o), etc.) necesita cuidarme y YO necesito que me cuide: “Renuncio a cuidarme por mi mismo, renuncio a procrear mis propios hijos, mi vida será con USTED. Me convertiré en su pareja indisoluble, jamás me casaré o uniré con otra persona.”

2. Desde la posición del niño: YO necesito que USTED me necesite. “No expreso mis sentimientos, no me divierto, ni juego. No te pido protección, suprimo mis miedos y tristezas. No alimento mis propios sueños. Me dedico a trabajar, a producir para solucionar sus carencias, y me hago cargo de todas sus responsabilidades; me convierto en su padre y en el de sus otros hijos”

3. Desde la posición de la madre: YO lleno tus necesidades ahora y TU, luego, te dedicarás a llenar las mías. “Me quedaré esperando la recompensa que me darás por todos los sacrificios que sufrí para cuidarte y levantarte; no importa que tengas que renunciar a tus propios sueños y proyectos.”

4. Desde la posición de la madre: YO necesito que no compartamos ni expresemos sentimientos. “No nos comunicaremos mediante las emociones ni los sentimientos, no tendremos actividad física de diversión o deporte. Compartiremos información y trabajo. Cumpliremos estrictamente con los rituales y ceremonias tradicionales, nuestra vida será rutinaria”.

Mis queridos amigos: En la simbiosis no resuelta la dependencia es total en lo físico, en lo económico y en lo emocional. En todos estos casos la simbiosis produce constantemente situaciones de malestar e infelicidad.

Además debemos considerar que se presentan situaciones de simbiosis con drogas, comidas, personas, dolores, sufrimientos, recuerdos, traumas, muertos, amores idos, animales, objetos, etc.; todos con el mismo final: infelicidad y sufrimiento.

El primer gran paso hacia la sanidad mental es hacer consciente todas nuestras situaciones de vida, no actuar bajo automatismos, razonar y decidir a partir de la conciencia de nuestro aprendizaje y crecimiento, de nuestra paz interior.

Les mando un gran abrazo liberador,


JAIME A.

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